La Despedida

"Te marchaste, sin aviso, te busqué y no estabas ya, el destino así lo quiso, pero tu alma no se irá, eras mi cómplice en los sueños, sabíamos que un día unidos volaríamos. Sé que tus alas se quedan conmigo, que desde el cielo tu abrazo es mi abrigo, Ángel divino me cuidas del mal, sé que camino con tu compañía, que con tu voz se me encienden los días, aunque tu puerta hoy está más allá, te puedo escuchar... Guardo el aire de tu risa que me da felicidad, te recuerdo muy cerca a mí compartiéndome tu paz, tanta alegría daba verte, quererte no se olvida... En cada libro está escrito tu nombre, en cada verso te siento cantar, tu mano me lleva directo a tu sombra, yo sé que una noche te voy a encontrar." -Anahi.



La verdad no sé cuantas noches me tarde en escribir esto, es muy difícil todavía, me cuesta mucho hacerlo y no me salen las palabras; hoy es 25 de Junio y son las 11:32pm, duele mucho despedirse de quien no quieres que se vaya, pero toca aceptar que nunca volverá.

De repente comienzas a temblar, cierras los ojos por un momento, al abrirlos te das cuenta que todo al rededor quedó vacío, miras al cielo, lo ves tan oscuro que sientes como si tuvieras los ojos cerrados aún, lo único que puedes ver son las imágenes que vienen a tu memoria.

Era navidad, no había árbol ni luces, pero la combinación de esas miradas llenas de tanto amor iluminaban más la noche que cualquier luz navideña, el calor de los abrazos del Abuelo transmitían tanta paz que nunca hizo falta chimenea... Años después, cada 31 de Diciembre se tornaba gris, son las 12:00am, un abrazo hizo falta y un puesto en la mesa que nunca más se volvió a ocupar.

En esta oportunidad quiero pedirte perdón, perdón por cada lágrima que derramé de tanto extrañarte, perdóname por no dejarte ir a tiempo, por querer aferrarme a ti aún sabiendo que es un imposible, pero sobre todo perdóname por no dejarte descansar, prometo dejar atrás las fotografías juntos, los momentos importantes, las fechas especiales y las tristes también, tu cumpleaños, el día del padre, tu aniversario, entre otras, guardaré todos esos recuerdos en mi mente y en mi corazón, pero sobre todo te prometo cuidar de la Abuela como tú lo hiciste, con ese amor incondicional durante tantos años.

Yo era tan solo una bebé, puedo jurar que la más afortunada de todas, esa que llegó a los brazos del mejor hombre del mundo, junto a ti crecí, pero nunca dejé de ser esa niña que sostuviste en tus brazos durante tantos años y un día inesperado fue a ella a quien le tocó sostener los tuyos para tener que soltarlos en algún momento.

Son muchas las cosas que quisiera decirte, pero sé que una sola página no bastaría, lo cierto es que nunca terminaré de agradecer por tanto amor, puedes irte muy orgulloso porque hiciste un buen trabajo, no soy la niña perfecta, tengo muchos errores, defectos y desaciertos, pero tus enseñanzas las tengo en mi memoria grabadas como un manual, es posible que por momentos te hayas enojado conmigo, y de verdad lo merezco, hubo momentos en los que no me comporté como tú hubieses querido, pero el tiempo no puede volver atrás, solo sé que hay cosas que nunca me permitiré repetir, por amor y por respeto a mi misma, eso lo aprendí de ti.

Que bonito sería despedirte con un último abrazo, con un último beso, pero es imposible, a menos que vinieras esta noche y me acompañaras en uno de mis sueños para sentir una vez más ese beso en la frente y tu bendición.

Gracias por hacer de mi vida la más feliz de todas, por ser el protagonista de mi historia, a tu lado viví los momentos más bonitos que nadie jamás podría imaginar.

Estos días me he hecho muchas preguntas, ¿Qué pasará con las almas cuando salen del cuerpo? ¿Sentirán algún tipo de emociones? ¿Serás feliz dónde estás? No tengo forma de encontrarles respuestas, pero aún así espero y deseo con toda la fuerza de mi corazón que estés sonriendo hoy y todos los días, que tengas esa sonrisa eterna que me regaló tanta paz cada día al amanecer y cada noche antes de dormir.

Yo sé que algún día dejaré de sentir ese vacío en el corazón, me diste amor de sobra, tanto que gracias a ti aprendí a no mendigarlo jamás, a dar tanto como pueda y a nunca conformarme con poco, un día te fallé, le fallé a tu legado de amor, pero aprendí la lección justo a tiempo y sé que hoy donde estás lo más probable que te sientas muy orgulloso de mi.

Hoy te prometo nunca más derramar una lágrima en tu nombre, prometo recordarte con orgullo de haber tenido el mejor Abuelo y el mejor Papá de todo el universo y todas sus galaxias.

No hubo nadie a quien amara tanto.

Hasta siempre,

Tu niña.💜